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Playas para ir de calas, en España
Es una de las joyas del Mediterráneo para disfrutar de
calas vírgenes. Sus orillas de aguas cristalinas de intenso color azul y
sus arenas blancas y finas te transportan a otros lugares del mundo.
Cada cala se encuentra insertada en un entorno que preserva la
naturaleza y que goza de toda la tranquilidad. Sus playas no están
masificadas y su costa no está para nada edificada.
Cala Macarella está considerada una de las playas
imprescindibles de la isla. Forma parte de uno de los conjuntos
paisajísticos más conocidos y bellos de Menorca.
Se halla en una zona
incluida en un área protegida y por tanto no hay ningún tipo de
edificación, salvo un pequeño restaurante-chiringuito cercano a la
playa.
Santanyi es una cala, normalmente muy concurrida.
Pero
es un lugar ideal para calzarse unas aletas, ponerse unas gafas y
practicar el snorkel gracias a sus aguas transparentes que tienen todas
las gamas de azules y verdes.
La cala de A Marosa-Buela es una playa atlántica de
fuerte oleaje y arena blanca.
Está muy cerca al municipio de Burela pero
situada en un lugar sin urbanizar. Es una playa preciosa muy apreciada
por los turistas que visitan la zona.
Subiendo por la montaña, hasta la
cima del Peñón de Ifach (Calpe)
Alrededor, a los pies y a los lados del Peñón de Ifach
hay una excursión de trece kilómetros por carretera por la que se pueden
visitar numerosas calas escondidas, de extraordinaria belleza, donde se
puede disfrutar del mar en su estado más salvaje.
Son las calas de Fossa,
Arenal-Bol, la Calalga, Cantal Roig y Puerto Blanco.
Desde
www.redestravel.com te
recomendamos que visites lo alto del peñón, hay una senda que lleva a
una gruta que atraviesa el monte al otro lado, y te ofrece la
posibilidad de seguir la senda agarrándote a las cuerdas en algunos
casos para llegar a lo más alto del peñón ifach, sin duda las vistas son
espectaculares.
Si deseas hacer una excursión allí podemos ofrecerte
innumerables fotos de la gruta, y de lo alto del Peñón, cuidado, la
gruta resbala mucho.
Convertido en parque natural el Cabo el Cabo de Gata
en Almería es un enclave mágico para los amantes del sol y la arena.
En
su interior hay numerosas calas, algunas de difícil acceso, como la de
San Pedro (foto), muy recóndita a la que se llega después de caminar por
un largo trecho.
Eso sí, una vez llegas se disfruta de la grandiosidad y
la rudeza del territorio.
Y es que esta cala es especial, excelente para
submarinistas, ya que posee un manantial de agua dulce y unos fondos
marinos de gran interés.
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